La fiscalidad de los alquileres de corta duración en Italia están pasando por importantes cambios estos últimos años, especialmente en respuesta al alto crecimiento de las plataformas digitales como Airbnb y Booking. Si tienes una propiedad en Italia y deseas alquilarla durante periodos breves, es fundamental conocer el marco fiscal vigente para evitar sanciones y optimizar así tus ingresos.
En este artículo, te ofrecemos una guía detallada, verídica y actualizada sobre la tributación de los alquileres de corta duración en Italia.
Índice
Los alquileres de corta duración se definen como aquellos contratos de arrendamiento de viviendas residenciales cuya duración no supera los 30 días consecutivos. Esta categoría incluye tanto el alquiler a turistas como trabajadores desplazados o estudiantes, siempre que el periodo no exceda el límite mencionado anteriormente.
El régimen fiscal de los alquileres turísticos de corta duración se rige por el artículo 4 del decreto legislativo 50/2017. Existe un impuesto sustitutivo con tipo fijo donde se aplica el régimen simplificado de Cedolare Secca.
Cedolare Secca se refiere al régimen fiscal especial y opcional para aquellos propietarios que alquilan viviendas. Consiste en un impuesto que sustituye la tributación cotidiana sobre la renta (IRPEF), así como de otros impuestos adicionales y tasas de registro. Su principal ventaja es la simplicidad y la previsibilidad fiscal, ya que se aplica un tipo fijo sobre los ingresos brutos obtenidos del alquiler.
A partir de este año este impuesto se estructura de la siguiente forma:
El régimen anterior solo se aplica si el propietario alquila hasta un máximo de cuatro apartamentos bajo contratos de corta duración. Si se superan las cuatro, la actividad se considera empresarial, lo que implica darse de alta como empresa, además de abrir un número de IVA y tributar, estos tipos pueden oscilar entre el 23% y 43% según los ingresos que se obtengan.
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Desde la reforma de 2017 es obligatorio que cada propiedad destinada al alquiler de corta duración cuente con un Código identificativo Nacional (CIN). Este código debe figurar en todos los anuncios y contratos, y su ausencia puede conllevar sanciones económicas.
Además de la Cedolare Secca, los propietarios deben tener en cuenta:
Si el propietario no cumple los requisitos, los ingresos por alquiler tributan bajo el régimen ordinario de IRPEF. En este caso se aplica una escala progresiva que a del 23% al 43% sobre el 95% de la renta obtenida, además de los impuestos locales y tasas de registro.
El gobierno italiano ha endurecido la fiscalidad de los alquileres turísticos de corta duración en respuesta a la presión social y política derivada por la escasez de viviendas asequible en las principales ciudades turísticas. El aumento del tipo impositivo al 26% y la reducción del número de propiedades permitidas son las dos novedades principales.
Además, la agencia tributaria ha intensificado los controles y la cooperación con las plataformas digitales para combatir el fraude y la economía sumergida en el sector.
La transparencia y la correcta declaración de los ingresos son ahora más importantes que nunca para evitar sanciones y problemas legales.
La fiscalidad de los alquileres turísticos de cora duración en Italia se ha vuelto mucho más estricta y complejo en esos últimos años. El régimen de la Cedolare Secca sigue siendo una opción ventajosa para la mayoría de pequeños propietarios, siempre y cuando no superen los límites que se han establecido. Es esencial mantenerse informado sobre las últimas novedades legales, cumplir con todas las obligaciones y en caso de duda consultar con asesores fiscales o documentos oficiales.