Esta es una pregunta muy habitual entre propietarios de inmuebles que desean destinarlos al alquiler vacacional o turístico. Esta duda inicial suele acompañarse de otras cuestiones relacionadas con las implicaciones legales, sanciones económicas, la normativa vigente y la fiscalidad asociada al alquiler sin licencia turística.
En este artículo analizamos en profundidad la normativa de Airbnb, qué ocurre si alquilas sin licencia, los riesgos de ser sancionado, y los beneficios de operar de forma legal. Además, te daremos un tip práctico para automatizar el check-in de tus huéspedes y evitar errores en la gestión diaria.
Índice
Airbnb es una plataforma intermediaria entre anfitriones y viajeros, y exige el cumplimiento de las leyes locales donde operan los inmuebles. Esto incluye que el propietario proporcione el número de licencia turística para poder publicar el anuncio. En algunas comunidades autónomas, si aún estás en trámite, puedes usar un número provisional.
Sin embargo, si no cuentas con una licencia válida ni un número temporal, Airbnb no permitirá que publiques tu vivienda como alojamiento turístico.
La plataforma está obligada legalmente a colaborar con las autoridades locales, y a verificar que las propiedades anunciadas cumplen la normativa. Esto significa que si no tienes licencia, tu anuncio podrá ser eliminado o rechazado. Además, tanto anfitriones como la propia plataforma pueden enfrentarse a sanciones por incumplir la normativa.
Teniendo en cuenta lo expuesto anteriormente, la respuesta corta es sí. Necesitas una licencia turística para poder acceder a la plataforma de Airbnb y poder promocionar tu anuncio. Los alquileres turísticos son estancias de corta temporada y necesitarás la licencia turística para poder recibir huéspedes. Cada licencia turística debe ser solicitada en la respectiva comunidad en la que se encuentre el inmueble.
Esta licencia acredita que tu vivienda cumple los requisitos de habitabilidad, seguridad y calidad establecidos por la legislación turística de tu comunidad autónoma.
Además, al tratarse de una actividad económica, deberás cumplir con las obligaciones fiscales y tributarias correspondientes, como declarar los ingresos en el IRPF y aplicar IVA o tasas turísticas si así lo requiere tu comunidad.
El alquiler vacacional se considera una actividad económica, y como tal, necesita cumplir con ciertos requisitos legales y fiscales. La licencia vacacional o turística acredita que la vivienda cumple con las condiciones establecidas por la normativa local para ser destinada a uso turístico.
La licencia turística asegura que los alojamientos cumplen con estándares mínimos de calidad y seguridad, protegiendo a los huéspedes de posibles fraudes o condiciones inadecuadas.
Tener una licencia permite a las autoridades locales controlar la actividad económica generada por el alquiler vacacional, asegurándose de que los propietarios cumplan con sus obligaciones fiscales, como el pago de impuestos correspondientes (IRPF, IVA, o tasas turísticas en algunas regiones).
Las consecuencias de operar una vivienda vacacional sin licencia turística pueden desembocar en problemas legales y sanciones económicas por parte de las autoridades. Estas sanciones pueden incrementarse si el incumplimiento persiste en el tiempo:
Las multas por alquilar sin licencia turística son cada vez más frecuentes. Por ejemplo:
Estas sanciones se basan en que el uso turístico sin autorización es considerado una infracción grave, y las multas pueden calcularse basándonos en el porcentaje del valor catastral o de mercado del inmueble.
Alquilar sin licencia turística conlleva riesgos económicos y legales significativos:
Desde el 3 de abril de 2025, se ha introducido un nuevo requisito: la comunidad de vecinos debe aprobar expresamente el uso turístico del inmueble.
Además, una reciente sentencia del Tribunal Supremo ha otorgado a las comunidades de propietarios la capacidad de prohibir los pisos turísticos si así lo decide el 60 % de los vecinos. Esto significa que aunque tengas la licencia turística, no podrás alquilar legalmente si tu comunidad lo impide.
Asegura el funcionamiento legal del negocio y una comunicación fluida con OTAs como Airbnb para poder hacer cualquier tipo de gestión y poder promocionar tu alquiler vacacional.
Contar con una licencia turística, asegura al huésped que el inmueble está en perfectas condiciones de habitabilidad y que está listo para poder convivir en él.
Podrás recibir asesoramiento por parte de organismo turísticos, algo que puede llegar a ser clave para incrementar tus ingresos.
La licencia ayuda a garantizar un equilibrio entre el uso turístico y el residencial, limitando conflictos relacionados con el ruido, el uso de servicios comunes o el aumento del tránsito de personas.
Utiliza herramientas como Check-in Scan para automatizar el registro de huéspedes, verificar su identidad y cumplir con la normativa de comunicación a SES.Hospedajes. Ahorrarás tiempo, evitarás errores y mejorarás la experiencia del viajero.
No es posible alquilar un Airbnb sin licencia turística, debido a que la propia plataforma te exige el número de registro a la hora de introducir un inmueble para su posterior promoción. Airbnb se asegura de cumplir con todos los requisitos legales a la hora de gestionar los anuncios de su alquiler vacacional.
La licencia turística es un mecanismo clave para la comunicación efectiva con OTAs y entidades públicas y actua como herramienta de confianza para asegurar que el inmueble es apto para su habitabilidad.
Tip para realizar de forma eficiente el registro de huéspedes:
Hacemos la comunicación de los datos de huéspedes ante SES HOSPEDAJES, SIBA-SEF y ALLOGGIATI por ti.